Mi mujer es una enamorada de los zapatos, y de los bolsos. Es una firme defensora de que una misma ropa, acompañada de unos complementos o de otros, no tiene nada que ver cómo queda. Que un tejano y una camisa, con el zapato y el bolso adecuado, puede resultar de lo más extremado y elegante mientras que un vestido de firma con un zapato poco apropiado puede resultar ridículo. Aunque no soy un experto en la materia, a menudo tengo que darle la razón.
De un tiempo a esta parte, he logrado hacerle ver que también las gafas son un complemento de moda, y que pocas cosas hay más elegantes y extremadas que coordinar el estilo y el color de la montura con el del bolso o los zapatos. Me ha costado que lo probara pero, desde que lo ha hecho, ahora es una enamorada también de las gafas.
¿Te animas a probarlo? Dinos qué te parece… ¿Mejor, o no, con gafas a juego?
16 enero,2018